¿Eres de los que piensas que la paella hecha en la costa sabe mejor? ¿O qué el pelo no te queda igual dependiendo de la ciudad en la que te duches? Puede parecer raro, pero en todas estas acciones (y sus consecuencias) es fundamental la calidad de agua.
Porque no todas las aguas son iguales. Como compuesto químico de la naturaleza que es, su estructura puede ser diferente.
Agua y cerveza artesanal
Te contamos esto porque el agua es el principal ingrediente, en cantidad, de cualquier receta de cerveza.Y es que, nuestra bebida favorita está compuesta entre un 88% y un 95% de agua. Además, a diferencia de los otros ingredientes básicos para elaborar una cerveza, el agua no puede ser eliminada o sustituida por otros.
De hecho, los estilos de cerveza se han asociado históricamente a zonas geográficas con aguas de gran calidad y con una composición química muy estable y característica.
¿Cómo se usa el agua en cervecería?
El agua se usa de dos maneras. Por un lado, es el ingrediente que tiene como principal función la disolución de los azúcares, los nutrientes de la malta, las proteínas y todos los componentes que intervienen en una receta.
En segundo lugar, el agua también se va a usar en todos los procesos de enfriado, generación de vapor y en la limpieza de instalaciones y envases.
¿Cuánta agua se consume para fabricar una cerveza?
Actualmente, se usan de 3.5 a 5 litros de cerveza producido. Es una cifra alta, pero que se ha reducido a la mitad en el último medio siglo: ¡en los años 80 se necesitaban 10 litros de agua por litro de cerveza!
¿Cómo influye el tipo de agua en una cerveza?
Lo primero que queremos deciros es que no es preocupéis, porque el tipo de agua va a tener un impacto muy pequeñito sobre el gusto o el aroma de vuestra cerveza. Como mucho se obtendrá una sensación más o menos salada o astringente, dependiendo de la concentración salina.
Sin embargo, la composición del agua sí que será importante para los procesos químicos que se realizan durante la elaboración de una birra.
Los conceptos químicos en cervecería son bastante complejos de explicar. Por eso, quedaros con estas 4 ideas:
- el rango ideal de Ph del agua para que salga un mosto rico debe estar entre el 5.2 y 5.5
- las aguas duras (las que tienen más concentración de magnesio) son mejores para la fabricación de cerveza. Además, estas aguas reducen el nivel de turbidez de la cerveza.
- las aguas muy alcalinas (que son las más ricas en bicarbonatos) no son nada buenas para la elaboración de cervezas.
- por último, la concentración salina también será un factor importante.
¿Y qué ocurre si el agua no es buena para hacer cerveza?
Seguro que eso de agua dura y agua alcalina os suena… En España, por ejemplo, es conocido que en la costa mediterránea el agua tiene mucha cal, esto es, concentración de minerales, en particular calcio y sales de magnesio.
Es decir, la composición del agua va a variar dependiendo de la zona geográfica y del entorno geológico. Entonces, ¿cómo se hace para elaborar una cerveza?
Pues muy fácil: el agua se puede tratar. Se pueden aplicar tratamientos que alteren la composición química del agua. También se puede filtrar para eliminar las partículas en suspensión y obtener un agua de óptima calidad para el proceso de fabricación.
Y por último, este tratamiento nos va a permitir reproducir el agua de una zona geográfica determinada.
Cervezas artesanas con un agua muy especial
Y por supuesto, en Beer Sapiens no podemos dejar de hablaros de nuestros cerveceros nacionales, que cuidan todos los detalles, incluido el agua. Os queremos hablar de algunas cervezas donde el ingrediente mayoritario (y del que tan poco se habla) está escogido con mimo.
La cervecera Ordum elaboró una edición limitada para el 130 aniversario del Balneario de Borines, donde se encuentra el manantial de agua con el que se han elaborado esta Amber Ale
La cervecera Rondadora también incorpora agua de montaña a sus recetas, exactamente del manantial de Fuendepera situado a 1000 metros de altitud. No dejes de probar la Tronzadora Amber Lager o la Quebrantahuesos Barbatus Strong Scotch Ale, entre otras.
¿Alguna vez habías pensado sobre el origen del agua de tus cervezas? Si a partir de ahora lo vas a buscar en los ingredientes de tu próxima birra artesana, ¡nuestra misión de educación cervecera habrá logrado su objetivo!
¡Nos vemos pronto! ¡Aguaaaa!