Creada en 2014, la Cervecera Smach es conocida como “la cerveza que apuesta por el sabor tradicional”, elaborando sus cervezas dentro de un proceso lento con materias primas de calidad. Son cervezas sin pasteurizar y no llevan ningún proceso químico que acelere la fermentación y, aunque tarda más en crearse, hace que merezca la pena porque alcanzan un resultado con más sabor, más aroma y más naturalidad.